Abres lo ojos y sólo ves sus labios, su sonrisa, esa peculiar manera de levantar la ceja cuando algo le hace gracia. Su pelo, sus manos, sus andares. Constante oyes su voz, y al entrar a la habitación crees reconocer su aroma.
Nada es real, todo son fantasías y esperanzas en las que se escuda tu corazón. Si, tu corazón, porque tu razón sabe lo que tienes que hacer, sabe cómo tienes que actuar, y sabes perfectamente como romper ese escudo, como hacerlo añicos y como dejarlo atrás.
Eres única, y lo sabes, sabes que esto sólo será un suma y sigue en tu vida, que al final encontrarás lo que buscas, porque está ahí, esperándote, pacientemente. Mientras tanto, tú disfruta del camino, de todo lo que te ofrece, recréate.
Tú eres totalmente autosuficiente, pero si alguna vez te flaquean las fuerzas sólo tienes que decírmelo, estoy aquí para ti, para ayudarte a ser mas sabia.
Ánimo mi niña, ya queda menos, y lo sabes, lo sabes y lo vuelves a saber.
Para la sabia Marieva